Pempi - febrero
La vida de un club de fútbol es un conjunto de ciclos, unos mejores que otros. Y es innegable que en el año 2000 en nuestro club comenzó un ciclo de la mano de Florentino Pérez. Este ciclo venía con una idea arriesgada y novedosa para un club que estaba en una situación económica extrema. Llegó Figo como primer gran jugador, se avanzó en el proyecto de
Pero la cumbre de este modelo fue el fichaje del jugador más mediático del mundo, de David Beckham. Fue la cumbre porque tras eso vendría el descenso. Era un modelo que empezaba a caer en lo deportivo y era rico en el económico. Un modelo que seguiría un año más con la incorporación de Owen. El inglés fue el último en llegar pero a la par, junto con el portugués Figo, el primero en irse. Fue al verano siguiente, el del 2005. Y ya se vislumbraba como saldrían los que un día vinieron por la puerta grande. Tanto el inglés como el portugués se marcharon por la puerta de atrás a pesar de entrar por la puerta grande. Era una forma incluso injusta de abandonar el club. Sin duda pagaron los últimos sin sabores de la galaxia. Un sabor tan amargo que nos hizo olvidar el dulce del principio.
Tras ellos dos se fue Zidane, con más honor, más elegante, como siempre fue. Se marchó él, no le echó nadie. Se fue porque veía que el modelo estaba acabado y no podía resistir esa frustración. Al menos el francés si se fue con el aplauso del Bernabéu en el bolsillo. El adiós de Zidane fue también el adiós del padre de la criatura, de Florentino. Un cambio en la presidencia del club que tan sólo parece haber provocado la intensificación del fusilamiento de los “galácticos”.
Y así hemos llegado a la situación actual, donde Beckham y Ronaldo, los únicos que aún están en el club y que los dejarán por la puerta de atrás, como ya lo hicieron otros, y como, lamentablemente, nos estamos acostumbrando a ver.
El inglés es un jugador comercial, sin duda, no es un fuera de serie aunque si un jugador que aporta cosas (centros, jugadas a balón parado…). Pero sobretodo ha sido un profesional del Real Madrid, que siempre defendió al club y por tanto, como se haría en cualquier caso de estas características, el club debería dar una despedida acorde con su historia. Beckham ha cumplido el contrato que firmó, se va a otro lado, pero por eso no se puede comportar la institución como un novio celoso. Aunque su aportación futbolística no haya sido espectacular, se merece una despedida digna. Como Ronaldo, quien nos ha sujetado durante mucho tiempo con sus goles. Es otra forma de entender el fútbol, menos sacrificado pero muy productivo. Un fenómeno que nos ha hecho sostenernos en los malos momentos. Un jugador que a su manera ha dado mucho y que como todos, se va por la puerta de atrás. Y ya se que faltan Raúl, Roberto Carlos o Casillas, pero para mí nunca fueron “galácticos”, eran los grandes jugadores que ya estaban antes. Esperemos que su salida del club sea tan digna como se merecen. Como se lo merecieron otros.
Pempi - Diciembre
3 Comentarios
Buen artículo, amigo. Saludos
"el club debería dar una despedida acorde con su historia."
Es más, aunque sólo fuese por egoísta interés comercial, hacerle una buena despedida a Beckham traería beneficios al Real Madrid.
Gran artículo, gran análisis y gran verdad que cuentas.
Hay que ver que con cada "galáctico" que se traía Raúl quedaba un poco más alejado de lo que había estado haciendo, pero las ganas y el sentimiento siempre vencen y Raúl ha vencido a todos ellos. Aunque ya no esté como antes, aunque nunca lo vuelva a estar, aunque no juegue mucho o no juegue nada, Raúl siempre ha estado ahí, con el equipo con el Club y con la Historia.
No puedo imaginarme qué resumen y análisis de su vida hará Raúl cuando se retire, cuando le pregunten dentro de 20 años sobre su carrera en el Real. Nunca sabremos si los "galácticos" le han 'robado' la oportunidad de triunfar a nivel internacional conr econocimiento de premios o si 'simplemente'habría sdo el mejor hombre de Club de todos los tiempos, pero lo que siempre sabremos es que él es el Gran Capitán del Real Madrid para siempre.
Por cierto, hablas de Ronaldo, ya se ha ido. Ha llegado a Milán y ha marcado dos goles. En la web de Livescore ponían el otro día que esos dos goles los había marcado "L.N.D.L. Ronaldo". Ronaldo sólo ha habido y hay uno, no hace falta poner las iniciales de su nombre para reconocerle y no equivocarse con Cristiano Ronaldo o Ronaldinho. Me parecío una falta de respeto al mejor 9 del mundo.
Publicar un comentario
<< Home